La vergüenza es fácil de entender como el miedo a ser excluido, de ser dejado fuera. ¿Hay algo en mí que si otras personas sepan o vean, puede ser que no merezco ser parte del grupo? Las únicas personas que no sienten vergüenza son las que no tienen capacidad de empatía o conexión. Nadie quiere hablar de ello, y cuanto menos se habla, más vergüenza. Lo que sostiene esta vergüenza: "No soy lo suficientemente buena, lo suficientemente delgada, lo suficientemente rica, bastante bonita, lo suficientemente inteligente, lo suficientemente exitosa".  La base de esto es una insoportable vulnerabilidad, esta idea de que, para ser aceptados, debemos permitir que se nos puedan realmente ver.

Algunas personas tienen un fuerte sentido de amor y de pertenencia, mientras que otros luchan para tener este sentido, preguntándose si son lo suficientemente buenos. Sólo una variable las separa. Las personas con un fuerte sentido de amor y pertenencia creen que merecen amor y pertenencia. Lo único que nos mantiene desconectados es nuestro temor de que no somos dignos de aceptación.

¿Lo que estas personas con un sentido de pertenencia tienen en común? La autoconfianza, la sinceridad, la autenticidad. Un sentido de coraje de decir lo que son con todo su corazón, el coraje de ser imperfecto. Ellos tienen la compasión para ser amable con ellos mismos en primer lugar, y también con los demás,

Ellos están conectados como un resultado de su autenticidad. Ellos están dispuestos a abandonar la idea de ser quien se cree que son, quién deben ser, al fin de ser lo que son. Eso es lo que tienes que hacer para conectarse. Abrazar su vulnerabilidad completamente, incluso si no es cómodo. Tener la disponibilidad de decir "te amo", de hacer algo mismo si no hay ninguna garantía,  de mantener la respiración a la espera del resultado del examen médico. Esté dispuesto a invertir en una relación que puede o no puede terminar bien.

La vulnerabilidad es el núcleo de la vergüenza y el miedo, de la lucha por la aceptación, pero también es la fuente de la alegría, de la creatividad, de pertenencia, de amor.

¿Qué estamos haciendo con nuestra vulnerabilidad? ¿Por qué luchamos tanto con ella?
Se anestesia la vulnerabilidad, cuando estamos tratando de ser aceptados por los demás.

¿Qué te hace sentir vulnerable? Tener que pedir ayuda a mi marido porque estoy enferma, iniciar relaciones sexuales con mi esposo / esposa; ser despedida, despedir a alguien; esperar el resultado del examen médico; este es el mundo en que vivimos. Vivimos en un mundo vulnerable. Y una de las maneras con que tratamos con esto es anestesiar la vulnerabilidad. Estamos más endeudados, obesos, adictos a las drogas y a los medicamentos...